Primera etapa capacitará a funcionarios municipales en estrategias de vinculación con la comunidad.
A través de un trabajo colaborativo, entre la Universidad de La Frontera y la Municipalidad de Temuco, se busca implementar centros de innovación social en espacios comunitarios y bibliotecas municipales que permitan reforzar el vínculo con la comunidad a través de la identificación de problemáticas y oportunidades presentes en el territorio. Para ello, es que funcionarios de bibliotecas municipales y gestores territoriales se están capacitando en estrategias que permitan abordarlas mediante acciones de innovación social en conjunto con la comunidad.
Leonor Seguel, gestora territorial del sector Pedro de Valdivia es una de las funcionarias municipales que es parte del programa de capacitación. “Todas las propuestas son válidas cuando queremos generar cambios y así aportar a la comunidad, es ese el desafío que nuestro alcalde nos ha planteado, compartir ese enfoque nos permitirá conectarnos con la realidad para construir un mejor Temuco”, señaló.
“Me parece fantástico que se hagan este tipo de capacitaciones al personal, necesarias para poder implementar ideas de innovación en cada uno de los macrosectores para un beneficio comunitario”, dijo Pablo Huichaqueo, funcionario del departamento de cultura bibliotecas.
Para el alcalde de Temuco, Roberto Neira, esta instancia es una oportunidad para potenciar el trabajo colaborativo como actores activos frente a los desafíos del desarrollo social, económico y ambiental de la comuna. “Quiero agradecer a la Universidad de La Frontera y a su Dirección de Innovación y Transferencia Tecnológica, porque estamos trabajando en un plan en conjunto que nos permita crear centros de innovación social en nuestra municipalidad, es por eso que este taller será un tremendo empuje para nuestros funcionarios de bibliotecas y gestores territoriales”, señaló.
Por su parte, Boris Yakovleff, ingeniero de proyectos de la Dirección de Innovación y Transferencia Tecnológica de la UFRO, explicó que “esto es primer paso para seguir avanzando en esta línea de trabajo colaborativo con el municipio y tratar de dar soluciones a
problemáticas sociales de la comuna, ya que a raíz de estas nuevas capacidades que se están entregando a los funcionarios, la idea es que se generen diagnósticos e ideas que nos permitan generar una puesta piloto donde, desde la academia, podamos generar soluciones a problemáticas reales de la comunidad”, puntualizó.
Para el 2023 el proyecto tiene contemplado una segunda etapa donde se ejecutarán dos iniciativas pilotos, las que se trabajarán directamente con comunidades afectadas según problemáticas identificadas, las cuales serán seleccionadas a través de un concurso abierto.