Afirman que los cupos de albergue se reducirán dramáticamente a sólo 20 camas en Temuco.
La Seremi de Desarrollo Social anunció el cierre de tres albergues de emergencia habilitados durante este invierno para dar refugio a las personas en situación de calle, entre ellos, los albergues de Villarrica, Angol y Temuco.
El 8 de octubre es el plazo impuesto para el cierre del albergue de emergencia implementado en el sector Amanecer, con lo que unas 20 personas atendidas por este beneficio deberán retornar a la calle, sólo con la opción de optar a uno de los 20 cupos dispuestos por el albergue anual del Hogar de Cristo que recibe recursos estatales para su funcionamiento.
Hace pocos días, una veintena de personas en situación de calle expresaron su preocupación y molestia por esta decisión. Hoy son las organizaciones sociales privadas, la mayoría de ellas dedicadas a las rutas nocturnas donde entregan alimento y cobijo a las personas que deben pernoctar a la intemperie, quienes están alzando la voz por una decisión apresurada.
PROBLEMÁTICA SOCIAL
Carlos Reyes, fundador y presidente de la Agrupación Apapachos. Si bien expresó que la decisión de cerrar estos albergues era algo que se conocía de antemano; lo que genera es una nueva problemática para las personas y familias que buscan un lugar seguro para escapar del frío y la lluvia que aún afecta a la región.
“Hay muchas personas que van a volver a la calle y lo ideal es que estos albergues se mantengan por lo menos hasta que se vea un mejoramiento de las condiciones climáticas, ya que la reducción de cupos de asistencia bajará de forma dramática a sólo 20 cupos en toda la ciudad de Temuco y no hay más”, indicó Reyes.
“Nosotros como organizaciones solidarias nos estamos organizando para continuar con nuestras rutas, pero claramente hemos tenido que aumentar la cantidad de raciones y aumentar los sectores para cubrir, ya que hoy no sólo la Feria Pinto y el centro de Temuco son los más ocupados por estas personas, sino que se suma también la Avenida Alemania, y más recientemente, la Isla Cautín. Esto revela que las personas se están movilizando a otros sectores por temas de cobijo y seguridad”, señaló.
“NUNCA FUIMOS RECIBIDOS”
A juicio de Reyes, esta realidad no ha sido visualizada por las autoridades regionales. “Nunca fuimos recibido por la Seremi de Desarrollo Social. El gobierno nunca se reunió con nosotros en todo el invierno, por lo que nunca pudimos contarles esta realidad. Ha faltado voluntad política para abordar esta temática; ellos sólo se escudan en los recursos que han entregado, pero si esos recursos fueran acordes a la situación actual, se verían rutas médicas todos los días y no sólo tres días a la semana y se entregarían más de 60 raciones diarias, y no las 20 que entrega el Hogar de Cristo. Desafortunadamente mantienen el mismo lineamiento de hace tres años, pero hoy la realidad es diferente, las personas en situación de calle han aumentado y están aumentando”, precisó.
La esperanza que queda, afirma Reyes, es que el gobierno pueda prorrogar el cierre de estos albergues, siendo una de las medidas que esperan sea acogida por el Delegado Presidencial en la reunión que sostendrán el próximo 7 de octubre. “Lo que queremos es que el gobierno y las organizaciones voluntarias dialoguemos y se pueda preparar de mejor manera el próximo año para así no lamentar una muerte, dar cuenta de esta realidad, y de paso, solicitar que los albergues no sean cerrados por lo menos hasta que las condiciones mejoren para quienes deben vivir en la calle”, concluyó.